El manejo de la maculopatía miópica traccional es controvertido, con dos enfoques principales: la vitrectomía precoz defendida por Jeroni Nadal y la intervención solo en casos de progresión clara, como propone Javier Araiz. La cirugía se indica en casos de deterioro funcional significativo, aunque los resultados pueden ser limitados. La observación es adecuada en muchos casos de estabilidad funcional. El tratamiento debe basarse en la evolución anatómica y funcional, priorizando la visión del paciente.