Álvaro Fernández presentó el caso de un paciente masculino con carcinoma renal metastásico que experimentó pérdida de visión bilateral indolora. El paciente estaba siendo tratado con durvalumab, un inhibidor de puntos de control inmunitarios. Tras evaluar al paciente, se diagnosticó una proliferación melanocítica uveal difusa bilateral, un raro síndrome paraneoplásico. La imagen mostró depósitos subretinianos y fluido intrarretiniano. A pesar de que este síndrome está relacionado con carcinomas sistémicos, su patogenia es desconocida. El tratamiento con Ozurdex y corticoterapia resultó en la remisión completa de los síntomas y una mejora en la visión. Sin embargo, algunos médicos sugieren que esta condición podría ser un efecto tóxico del fármaco en lugar de un síndrome paraneoplásico. El paciente sigue estable y sin recurrencia de la enfermedad ocular tras la retirada del medicamento.